A don Santiago Bernabéu no le gustaban los futbolistas con padre protector. Hoy, muchos años después, casi a ningún club del mundo le agrada un jugador cuyo padre hagas las veces de representante. Bien lo saben en Valencia donde ya están más que hartos de Juan Manuel Mata Rodríguez, padre y agente de Juan Mata.
El padre-agente del jugador internacional del Valencia se las apaña todos los veranos para lanzar y enredar con supuestas ofertas millonarias de los clubes más importantes de Europa para hacerse con los servicios de su hijo-representado. El año pasado sólo le faltó ponerle la camiseta del Barça a su hijo para dar por cerrado un acuerdo con el club azulgrana. Este verano ya ha tenido pie y medio en Londres para firmar con el Arsenal como sustituto de Cesc Fábregas…pero estamos en agosto y Mata sigue vistiendo el uniforme del Valencia.
El club que preside Manuel Llorente no vería con malos ojos la salida de Mata por las cantidades que maneja su padre pero éstas no deben ser tantas ni tan generosas como Mata sénior va contando por ahí. Lo que sí es mucha es la presión mediática que un mes tras otro el padre del jugador se encarga de trasladar al club con la única finalidad de una continua mejora de contrato. Un contrato renovado hace apenas seis meses hasta 2014.
No me fío de los jugadores que cambian cada 2x3 de equipo. Del Castilla se fue al Valencia. En el cuadro ché, si no llega a ser por Koeman, hubiera durado un telediario. Estuvo con pie y medio en Zaragoza y ahora, tras coquetear con Barça, Arsenal y alguno más, ficha por el Chelsea...Buen negocio, excelente negocio para el Valencia.
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