Del Bosque desluce el récord de Casillas

A veces las buenas intenciones o los buenos sentimientos no bastan. Del Bosque, creyéndose que hacía un favor a Iker, estaba afeando un registro para enmarcar. El seleccionador, con su acción, no favoreció a Casillas ni tampoco a sí mismo, sino todo lo contrario.

La última Copa

El Barça cerró el ciclo de Guardiola como ambos merecían, equipo y entrenador. La Copa es el último trofeo de Pep, una competición menor sí, pero un título más a sumar a su deslumbrante palmarés. El Barça fue fiel a sí mismo, fiel a su estilo, fiel a su técnico.

Los niños ya saben por qué son del Atleti

Hoy los padres por fin pueden hacer entender a sus hijos porque "somos del Atleti" habiendo caminos muchos más fáciles en la vida, como ser del Madrid o el Barça. Y lo van entendiendo a razón de títulos de ‘Europa Leagues’. Son alegrías escasas, y menores según algunos, pero distintas.  El Atlético vive en el caos. Por eso, tal vez, sepa desenvolverse en él como ningún otro equipo. Ayer logró su tercer título continental en apenas 24 meses. Sobreviviendo en su confusión continua, de la final de Hamburgo a la de Bucarest no repitió ni un titular, cosas del ‘Atleti’.

Nadal y Madrid, una historia de desamor

A Nadal no le gusta el Masters de Madrid. No le ha gustado nunca pero cada año que pasa resulta más evidente. El descontento de Rafa, lejos de apaciguarse con el paso del tiempo, va en aumento. Su actitud tan hostil hacia un torneo español siempre ha extrañado, aún teniendo razón en algunas de sus quejas. Sin embargo, lo de este año ya supera lo lógico y lo razonable. Está bien discrepar, debatir o discutir pero la postura beligerante del manacorense con todo lo que tenga que ver con el Mutua Madrid-Open no puede ser aceptada.

La traición de Guardiola

Guardiola se ha traicionado a sí mismo.  Su fuero interno ha podido con él. La cercanía de su adiós ha provocado que el corazón le ganara la partida a la cabeza, que sus pensamientos fluyeran por su boca sin pasar por el filtro de lo políticamente correcto.  Por fin hemos visto a Pep Guardiola en estado puro, a la persona y no al personaje que el éxito continuado había creado.