Serge Ibaka, Nikola Mirotic y Ricky Rubio. Tres nombres propios para tres situaciones diferentes. La FEB tiene un dilema respecto a los dos primeros; el tercero tiene un dilema consigo mismo. Mirotic e Ibaka, progresan adecuadamente; Ricky, necesita mejorar.
La FEB lo tenía claro hace un par de meses: Ibaka, en trámites para nacionalizarse español, era el presente inmediato y Mirotic era el futuro. El jugador de los Oklahoma Thunder era el elegido y su presencia en el próximo Campeonato de Europa estaba única y exclusivamente a expensas del ‘papeleo’ para adquirir la nacionalidad española. El ex jugador de L'Hospitalet, DKV o Ricoh Manresa es un portento físico, gran anotador, cuenta con un poder de intimidación fuera de lo común y a sus 22 años posee una gran experiencia internacional (ACB y NBA).
Sin embargo, la espectacular irrupción de Mirotic en la actual temporada ha roto los esquemas previstos inicialmente por la FEB. La normativa FIFA sólo permite llevar a un nacionalizado por selección y ahora surge el debate. El talento que se le presuponía al jugador del Real Madrid se ha visto refrendado con creces en lo que va de año, tanto en la competición doméstica como en Euroliga. A los fundamentos baloncestísticos de primer nivel del ala-pívot madridista se le ha sumado uno de esos intangibles que tanta importancia tienen en el deporte de la canasta, su capacidad de liderazgo. Mirotic asume con una naturalidad impropia para su edad la máxima responsabilidad en los momentos más delicados. (La sangre balcánica –nació en Montenegro- que corre por sus venas seguro que tiene algo que ver con esta circunstancia). El ‘12’ del Real Madrid también tiene a su favor un mayor vínculo con España que su ‘competidor’ Ibaka: mientras que Mirotic ya ha defendido los colores de la selección española en un Eurobasket sub-20, el congoleño adquirirá el pasaporte español por el proceso de carta de naturaleza que otorga el Ejecutivo mediante Real Decreto.
Así que a día de hoy, las opciones de los dos jugadores de participar en el Eurobasket de Lituania de 2011 están al 50%. La solución es y debe ser sólo de Scariolo y sus criterios deportivos.
Ricky Rubio
Sin embargo, la espectacular irrupción de Mirotic en la actual temporada ha roto los esquemas previstos inicialmente por la FEB. La normativa FIFA sólo permite llevar a un nacionalizado por selección y ahora surge el debate. El talento que se le presuponía al jugador del Real Madrid se ha visto refrendado con creces en lo que va de año, tanto en la competición doméstica como en Euroliga. A los fundamentos baloncestísticos de primer nivel del ala-pívot madridista se le ha sumado uno de esos intangibles que tanta importancia tienen en el deporte de la canasta, su capacidad de liderazgo. Mirotic asume con una naturalidad impropia para su edad la máxima responsabilidad en los momentos más delicados. (La sangre balcánica –nació en Montenegro- que corre por sus venas seguro que tiene algo que ver con esta circunstancia). El ‘12’ del Real Madrid también tiene a su favor un mayor vínculo con España que su ‘competidor’ Ibaka: mientras que Mirotic ya ha defendido los colores de la selección española en un Eurobasket sub-20, el congoleño adquirirá el pasaporte español por el proceso de carta de naturaleza que otorga el Ejecutivo mediante Real Decreto.
Así que a día de hoy, las opciones de los dos jugadores de participar en el Eurobasket de Lituania de 2011 están al 50%. La solución es y debe ser sólo de Scariolo y sus criterios deportivos.
Ricky Rubio
Ricky es talento puro. Es un jugador nacido por y para el baloncesto pero su temprana explosión le está pasando ahora factura. La evolución del joven jugador catalán ya sufrió un receso la pasada temporada, justificado entonces como el "annus horribilis” que lleva inherente toda precocidad extrema. No obstante, lejos de recuperar su progresión en el presente ejercicio, los números de Ricky son aún peores que los de la anterior campaña. El jugador del Barça anota poco más de 5 puntos por partido (5.1), reparte algo más de 4 asistencias por encuentro (4.4) y sus porcentajes en el lanzamiento son pésimos (22% en tiros de 3, 38% en los de 2 y un 74% en libres). Ricky ya no defiende como antes ni resulta tan imprevisible en el juego de ataque, tal vez lastrado por esa incapacidad a la hora de mejorar su lanzamiento exterior. Su falta de confianza es tanta como su fatiga mental.
Ricky pierde protagonismo a pasos agigantados y si aún resiste en pie es gracias al extraordinario acompañamiento con el que cuenta en el Regal Barcelona porque en otro equipo su figura ya estaría tambaleándose. Sin embargo, ese aparato protector que hoy en día es el conjunto azulgrana podría volverse en su contra a corto y medio plazo.
A principios de año, el New York Times, a través de Jonathan Givony, hacía una reflexión sobre el jugador español y dejaba en el aire una pregunta. El análisis del prestigioso diario norteamericano decía que "rara vez se puede decir que un jugador de 20 años ha alcanzado su cima, pero Ricky ha puesto muy alto el listón con su juego precoz". El interrogante de Givony asustaba: ¿Está el espléndido futuro de Rubio ya en el pasado? La respuesta solo la sabe Ricky, que a sus 20 años se enfrenta a una situación desconocida para él. La lógica y sus condiciones baloncestísticas dicen que superará este momento pero hasta que Ricky decida, la duda existirá.
Serge Ibaka 18/09/1989
Nikola Mirotic 11/02/1991
Ricky Rubio 21/10/1990
http://www.youtube.com/watch?v=BVuGaAqZJHU (Avance 'Informe Robinson' Serge Ibaka)
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